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Boni Navarro Poveda

Francisco Moreno Sáez

Localidad perteneciente a la comarca del Vinalopó Mitjá. Según el censo de población, en 1930 tenía 5.333 habitantes y 6.121 en 1940. Se tiene constancia de que las primeras sociedades de socorros mutuos aparecen en los primeros años del siglo XX, impulsadas por los republicanos federales junto a una incipiente organización de Obreros Agrícolas propiciada por los socialistas desde Alicante¹.En 1900 varios obreros constituyen la sociedad de socorros “La Protectora”; dos años más tarde, eran 600 asociados ya que tuvo el apoyo activo de la burguesía agraria local².

Según el semanario Mundo Obrero de Alicante, el Partido Socialista de Petrer, se constituyó en 1909 y permaneció activo hasta su clausura en 1939. A partir de 1911 los socialistas serán los responsables de la creación de varias sociedades de obreros Tintoreros y Tejedores Mecánicos, Canteros, Obreros Agrícolas y Zapateros. Compartían la dirección de la Sociedad de Oficios Varios con los anarquistas locales.Las Juventudes Socialistas de Petrer eran, en 1914, una de las 10 agrupaciones socialistas existentes en la provincia..

En 1912 se conoce la existencia de una huelga de Canteros propiciada por la UGT y durante este mismo año se inició la huelga de la fábrica de “Castelló, Soler y Cía” que se prolongó varios meses. La fábrica contaba con la participación del banquero noveldense Luis Salas quien puso en marcha más de 100 nuevos telares³. Las peticiones de los trabajadores, al parecer, no eran excesivas puesto que “los precios en la mano de obra en los mismos géneros que se fabrican aquí también, son mayores en Elche, mucho más, que el tanto por cien que piden de aumento los tejedores de Petrel”⁴. En julio de 1912 se detiene a varios huelguistas por el supuesto delito de coacción, los compañeros Juan Bautista Brotons Beltrán, José Tortosa Rodríguez y Félix Brotons Navarro, son conducidos por la guardia civil a la cárcel de Monóvar. Tres jóvenes de 15 años que intentaron abrir una suscripción para los presos, también fueron detenidos y encarcelados⁵. La prensa obrera de la provincia se volcó en la información sobre el conflicto y abrió suscripciones para recoger fondos que ayudasen a los trabajadores de Petrer. Una Comisión con un representante de cada pueblo visitó al Gobernador Civil y le pidió el cumplimiento de la ley reguladora del trabajo de la mujer y el niño ya que en contra de lo legislado se estaban empleando menores en la fábrica. En marzo 1920 hay constancia de la organización del gremio de Zapateros de Petrer.

A finales de diciembre de 1913 ya se tienen noticias de la existencia de la Juventud Socialista de Petrer. Su objetivo es luchar por mejorar la situación de los obreros, organizar grupos de resistencia con dineros comunitarios para mantenerse durante las huelgas, exigir que la administración municipal sea honrada y beneficie a todos los ciudadanos y luchar por el fin de la guerra de Marruecos. En 1917 el Centro Obrero del partido socialista fue desahuciado y quemados muebles y documentación, lo que provocó numerosos mítines de protesta y la llegada de Vicente Barrio para mediar en el conflicto. A finales de año, la huelga general convocada en toda España tuvo un seguimiento importante en la localidad. En 1919 hubo una huelga del calzado por un aumento de los salarios y el establecimiento de la jornada de ocho horas de trabajadores de Elda y Petrer.

En 1920 el PSOE tenía 200 afiliados frente a los 100 de Elda o los 192 de Alicante⁶.La celebración del 1º de mayo en 1928 trajo a Petrer a varios dirigentes socialistas provinciales y al poeta Miguel R. Seisdedos, conocido como “el poeta de los humildes”. En 1928 la Juventud Socialista de Petrer tenía 40 afiliados y era la segunda en número de la provincia después de Elche⁷.

Los anarcosindicalistas, en 1919, ascienden a 300 obreros federados, según los datos de las Sociedades Obreras alicantinas asistentes al Congreso de la Comedia celebrado en Madrid. En mayo de 1933 se celebró una huelga general convocada por la C.N.T. En las elecciones de noviembre y diciembre de 1933, las primeras de la historia española en las que votarían las mujeres, la CNT abogó por la abstención. La abstención local fue de un 31’4%, en Elda alcanzó el 56’3% siendo la media nacional de un 31’17%. Durante la Guerra Civil la labor política y propagandística de la CNT se incrementó a la par que su número de afiliados.

En 1926 los fabricantes de calzado comienzan su organización colectiva. En febrero se creó la “Federación de Fabricantes de Calzado de Elda y Petrel” para enfrentarse a la crisis productora y a las protestas de los trabajadores contra la introducción de máquinas en las fábricas que hacían peligrar muchos puestos de trabajo. Petrer se adscribió a la “Unión Nacional de Fabricantes de Calzado” que se creó en Elda en octubre de este mismo año.

En octubre de 1929, el alcalde y fabricante de calzado Luis Villaplana, impresionado por las conductas de trabajo observadas en una fábrica de calzado que visitó en Alemania, intentó implantar en la suya la norma de no fumar durante la jornada laboral. El resultado fue una huelga que duró ocho días.

El 24 de marzo de 1930 se inició la huelga de las aparadoras de Elda y Petrer como protesta porque los fabricantes cobraban a las obreras el hilo que empleaban en el aparado a un precio superior al de coste. La protesta se convirtió en una huelga general pues se unieron 8.000 obreros y 60 talleres que permanecieron cerrados durante un mes. El triunfo fue para los trabajadores al conseguir un pequeño aumento salarial y la inclusión gratuita de los hilos en el material de aparado.

Las protestas de diciembre de 1930 desencadenaron en Petrer una dura represión por parte de la patronal y la Guardia Civil, muchos obreros se vieron en la calle, despedidos y sin posibilidad de ser contratados. La creación de Cooperativas de producción y consumo fue temporalmente una solución. Se tiene constancia de que en 1928 funcionaba la cooperativa obrera “La Dignidad” del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). La cooperativa “El Rayo” tuvo una corta existencia, dos años, mientras que la de “El Faro”, también socialista, creada en junio de 1930, dio trabajo a más de 100 familias: su dirección estaba formada por Luis Amat Maestre, “El Bravo”, como presidente, Pascual González Martínez, como secretario, y Luis Arráez Martínez, como gerente.

La grave crisis económica que afectó a todo el país se hizo presente en la comarca, obligando a los ayuntamientos a realizar inversiones en obras públicas como instalar luz eléctrica, reparación de calles y aceras. En Petrer se amplió el camino a Elda y se construyó un depósito de agua. En las elecciones municipales del 12 de abril de 1931, el Partido Socialista obtuvo 1.407 votos y cinco ediles: José García Verdú, dependiente de ultramarinos; Gonzalo Beltrán Boyé, alfarero; Luis Amat Poveda, obrero del calzado; Pascual González, obrero del calzado y Tomás Tortosa Rodríguez, obrero del calzado. La alcaldía la ocupó el republicano radical Santiago García Bernabéu.

En noviembre de 1931 se celebró en Villena el XI Congreso Socialista de Levante en el que participaron 17 agrupaciones de la provincia de Alicante donde “el descontento con la participación gubernamental del PSOE comenzaba ya a manifestarse en proposiciones como la de la agrupación de Petrel, en la que se pedía que el Partido Socialista no buscase ni aceptase coalición con ningún partido, concurriendo autónomamente a las elecciones”. En abril de 1934 el alcalde y la totalidad de los concejales socialistas fueron destituidos sin motivo; una resolución favorable a la insurrección revolucionaria de octubre y su posterior apoyo llevó a la cárcel a diecinueve trabajadores socialistas y miembros de la UGT, acusados de apoyar la Huelga Revolucionaria.

Las elecciones de febrero de 1936 dieron el triunfo al Frente Popular con un 53,2% frente al 44,6% de la candidatura de derechas, lo que provocó la dimisión inmediata del gobierno y la reposición en sus puestos los cargos municipales arbitrariamente destituidos en 1934. La situación económica y las condiciones de trabajo eran difíciles para la clase obrera y a finales de junio comienza una nueva huelga del calzado que se prolonga durante dos meses. La sublevación militar interrumpe la protesta en Petrer; sin embargo, en otras poblaciones donde la CNT tiene mayoría, la huelga no finalizó hasta una mes más tarde.

Con el golpe de estado del 18 de julio, en Petrer, como en la mayoría de los pueblos de la provincia, se organizaron Comités de Defensa para neutralizar a los sublevados que esa noche se armaron para salir a las órdenes del sargento de la Guardia Civil con el propósito de tomar el pueblo y adherirse a la rebelión. La acción decidida de los partidos y sindicatos del Frente Popular y la entrega de armas a los milicianos hizo posible neutralizar a los sospechosos de apoyar la sublevación. Treinta personas fueron detenidas y juzgadas por el Tribunal Popular de Alicante, quince de ellas fueron declaradas culpables y 8 de fusiladas.

Según la Causa General, el 17 de octubre 1936 fueron fusilados en Alicante los vecinos Gabriel Brotons Payá, contable, de 40 años; Julio Román Aracil, oficinista, de 29 años y Rafael Duyos Riset, médico, de 49 años, miembros del Partido Republicano Radical; Julio Tortosa Poveda, de Acción Católica, zapatero, de 18 años; los falangistas Fernando Bernabé Máñez, oficinista, de 27 años, y Pedro Requena García, oficinista, de 22 años; José Perseguer Ferrero, farmacéutico, de 33 años, y Antonio Torres Martínez, representante, de 35 años, afiliados a Derecha Regional. Fueron asesinados, sin juicio previo, “paseados”, Ventura Navarro Payá, Leopoldo Pardínez Román, y Joaquín Poveda Gómez, los tres del Partido Republicano Radical, y el cura párroco, Bartolomé Muñoz Golf. La Causa General señala como sospechosos a Asdrúbal Guerrero, en paradero ignorado, y José Payá García, sentenciado a muerte y ejecutado, Pedro Rico Cerdá, Vicente Rodríguez, José Amorós Pérez, Ramón Congost, Celedonio Sirvent Navarro, Salustiano Espí Reig y Antonio Rico Beltrán.

También, durante los primeros meses se produjeron los siguientes hechos: incendio y saqueo de la Iglesia parroquial, las ermitas de San Bonifacio y Santísimo Cristo, más otras cuatro en partidas rurales. Los sospechosos, según la Causa General, eran Pedro Rico, Silvestre Rico, Vicente Rodríguez, Celedonio Sirvent, sentenciados, ejecutados; Antonio Rico Beltrán, condenado a treinta años, Juan Bautista Brotons Maestre y Adrián Torregrosa, en paradero desconocido.

El gobierno municipal del Frente Popular a través de los sindicatos UGT-CNT se incautó importantes fábricas, entre ellas Calzados Luvi, S.A., García y Navarro, Alfonso Chico y una fábrica de mosaicos. En todas ellas se crearon comités de dirección o consejos obreros con la participación de los sindicatos y de los propietarios de las fábricas. También la Federación Provincial Campesina determinó en su primera asamblea provincial, celebrada en febrero de 1937, colectivizar el campo a través de cooperativas. En Petrer se destinaron 1.202 tahullas para ese fin⁸.

Las primeras semanas después de la sublevación un buen número de jóvenes, socialistas, anarquistas, comunistas, se enrolaron como milicianos en el ejército popular y marcharon a la defensa de Madrid. Un gran número se alistaron en el Batallón Octubre 11 bajo el mando de Fernando de Rosa, de las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU). Lamentablemente, un buen número de petrerins dejaron su vida durante los primeros meses de guerra en la sierra de Guadarrama. Sin preparación militar alguna, sin adiestramiento y con las armas “contadas”, dieron un ejemplo de heroísmo y valentía diga de admiración, como fue el de la miliciana, Remedios Jover Cánovas, ascendida a teniente por méritos de guerra. Con la organización del ejercito de la República, nuestros milicianos formaron parte de la 30 Brigada Mixta, 117 Batallón 1ª Compañía.

Desde la sublevación militar el paro laboral no dejó de crecer y una comisión de los sindicatos se entrevistó con el Ministro de Industria y Comercio para estudiar la posibilidad de crear un sindicato de compra y venta de calzado con ayuda de préstamos oficiales. Administrado por seis patronos y seis obreros, se creó el Sindicato de Industria del Calzado de Elda y Petrer (SICEP) que llegó a controlar 80 fábricas y dar trabajo a más de 7.000 obreros. En el primer año de guerra, bajo el control obrero de la UGT y la CNT, se entregaron 350.000 pares de botas que el Ministerio de Guerra había solicitado, además de mochilas, correajes y polainas para el frente. En 1938 el capital de la SICEP ascendía a 100 millones de pesetas “en maquinaria, edificios, fábricas, en objetos de trabajo y en catorce o quince millones de pesetas representados en zapatos fabricados”⁹.

El 19 de febrero de 1937 cambió la Corporación municipal y aceptó el cargo, por primera vez, el cenetista José Maestre Maestre. El 20 de mayo de 1938 será la militante libertaria, María Soriano Beltrán la primera mujer que ocupe un cargo en el gobierno municipal. Desde febrero de 1937 ocupó la alcaldía el socialista Rosendo García Montesinos.

A mediados de 1938, ante el avance de los sublevados, las fábricas de armas de la República fueron trasladadas a la retaguardia. En Petrer se instalaron fábricas procedentes de la Unión Naval de Valencia en las fábricas de calzado de Alfonso Chico y García y Navarro. Fue la fábrica nº 22, dependiente de la Subsecretaria del Ejército, bajo la dirección de técnicos asturianos. Trabajaban en las fábricas cerca de 250 personas, 24 horas del día, en tres turnos. Fusiles, ametralladoras, granadas… salían de Petrer para el frente de forma coordinada con la Fábrica nº 11 de Elda y la nº 3 de Novelda. Las instalaciones contaban con un refugio antiaéreo que todavía se conserva, a la espera de su rehabilitación.

La carencia de moneda fraccionaria obligó al Consejo Municipal a emitir billetes de 25 y 50 céntimos, de 1 y de 2 pesetas. Los niños refugiados de la guerra que vivían en la colonia del Poblet colaboraron en la “Campaña de Invierno” del Socorro Rojo para comprar ropa y mantas a “los soldados de la libertad”¹⁰. El Poblet, una frondosa finca, rodeada de jardines y una extensa pinada, fue incautada a su dueño por el Comité Agrícola del Frente Popular con destino a la explotación agrícola y hospital de sangre para combatientes heridos de las Brigadas Internacionales. Meses más tarde, fue colonia infantil para niños refugiados que escapaban de los bombardeos en sus ciudades. Unos meses antes de acabar la guerra, fue un centro de control de vuelo y por último, desde el 25 de febrero 1939, sede de la Presidencia del Gobierno de la Segunda República, hasta su partida al exilio la mañana del 6 de marzo de 1939, ante la amenaza de ser detenidos por tropas sublevadas.

Al acabar la guerra el ejército de ocupación tomó el pueblo y nombró a José María Román Maestre alcalde presidente de gestora del nuevo gobierno municipal franquista. La represión fue inmediata, era el momento del desquite, son muy pocos los sumarios de Consejos de Guerra que no lleven la denuncia y el informe preceptivo de la Guardia Civil, la alcaldía y la Falange. El sargento del puesto de la Guardia Civil, Arcadio Sánchez, ejerció una represión muy dura ya que había sido encarcelado y librado de la pena de muerte por dar apoyo a los militares rebeldes. La represión se centró en primer lugar, sobre las personas que formaron parte del Comité Antifascista y que decidieron sobre las detenciones de personas y requisas de viviendas, dando prioridad a aquellos que formaron parte de dicho Comité y que actuaron de testigo de cargo en el Tribunal Especial Popular que condenó a muerte a ocho acusados.

En segun o lugar, por medio de torturas y palizas, los vencedores trataron de conocer a los autores de las muertes, violentas y sin juicio previo, de las tres personas, entre ellas un sacerdote, detenidas en sus casas y asesinadas y arrojadas en las cunetas de la carretera. También, el asesinato por una muchedumbre, tras un recorrido por las calles del pueblo, de Joaquín Poveda Gómez, “Frescoreta”, tras haber sufrido insultos y vejaciones. Fueron condenados a muerte por este hecho, quince vecinos, entre ellos dos mujeres; cinco de ellos vieron conmutada la pena de muerte por la de treinta años de prisión y otros quince fueron condenados a penas entre 30 y 3 años de prisión.

En el juicio del Tribunal Popular de Alicante de octubre de 1936 que condenó a muerte a ocho vecinos acusados de apoyar la sublevación militar, participaron como testigos de cargo dos afiliados al PSOE: Rosendo García Montesinos –alcalde- y Luis Arráez Martínez –Gobernador Civil-. Ambos fueron condenados a muerte al acabar la guerra. Por el mismo motivo el Presidente de Izquierda Republicana, Bonifacio Montesinos Poveda, y Pedro Rico Cerdá, de la CNT, fueron fusilados. Los restantes encausados, Vicente Mollá Montesinos, Miguel Máñez Montesinos, de JSU, Luis Amat Poveda, del PSOE, y Ramón Congost, de la CNT, pudieron escapar cruzando la frontera.

Es importante destacar la represión ejercida sobre las mujeres que apoyaron la causa republicana. Treinta y cinco mujeres fueros represaliadas a penas de cárcel y destierro; otras fueron humilladas obligándolas a beber aceite de ricino o limpiar letrinas. Estuvieron hacinadas en una cárcel improvisada de Petrer, hasta que fueron trasladadas al campo de concentración de Monóvar, fueron juzgadas en Alicante y cumplieron condena en las cárceles de Valencia y Málaga alejadas de sus familiares. Dos mujeres fueron fusiladas, Josefa Poveda Beltrán y Josefa Sambartolomé Poveda. Dos hermanas, Josefa y María Soriano Beltrán fueron las primeras mujeres que ocuparon un cargo en el Ayuntamiento de Petrer y resultaron condenadas por su compromiso político a 12 y 6 años de prisión. Purificación y Remedios Castelló Brotóns, ambas milicianas, fueron condenadas a 30 y 20 años de reclusión; Libertad Brotóns Andreu, de 18 años, fue condenada a 20 años por formar parte de una compañía de teatro, Josefina Montesinos, de la JSU lo fue a doce años, y Dolores Marcos Martínez, de las JJ.LL, con 21 años marchó al exilio en el vapor Stanbrook. Y así hasta un total de treinta y cinco mujeres represaliadas de las que hemos podido tener noticias.

El estudio realizado sobre la represión ejercida a los republicanos de Petrer asciende a 278 personas. Esta cifra representa un porcentaje del 5,03% de la población. El sindicato UGT y el Partido Socialista son las organizaciones mayoritarias con 84 represaliados y otros 20 de la JSU. La CNT con la FAI y las Juventudes Libertarias suman 74 encausados. El Partido Sindicalista tiene 10 y Unión República e Izquierda Republicana 6 y 9, respectivamente.

El Tribunal sobre Responsabilidades Políticas, TRP, abrió expediente a 56 vecinos, aunque probablemente fueron algunos más, ya que parte de los archivos han desaparecido. Hubo dos encausados por el Tribunal contra la Masonería y el Comunismo, TRMyC, uno de ellos el gobernador socialista Luis Arráez.

Los exilados ascienden a 17. Francia, Argelia fueron el primer destino, luego algunos marcharon a Chile o Argentina.

Los represaliados eran en su mayoría jóvenes, los de 20 años a 30 representan el 51,4% que se convierte en 70% si añadimos los de 31 a 40 años, y su profesión es mayoritariamente la de zapateros.

El resumen de sentencias judiciales abarca 27 penas de muerte, 9 de ellas conmutadas a 30 años. A 30 años de cárcel fueron condenados 21 republicanos, a 20 años de cárcel 19 y a 12 años 36. Murieron en la cárcel 2.

1 - MORENO SÁEZ, F. Las luchas sociales en la provincia de Alicante (1890-1931). Edita UGT. Alicante, 1988, pág. 427.

2 - PAVÍA, S. Los años decisivos 1923-1939. Edita Diputación. Alicante, 1993, pág. 48.

3 - El Carrer, nº 130 -dic 90.

4 - Trabajo, Elche, 18-08-1912.

5 - Trabajo, Elche, 14-08-1912.

6 - MORENO SÁEZ. F., "La crisis del sistema político de la Restauración. 1900-1923”, en AA.VV., Historia de la Provincia de Alicante. Tomo VI. Edad Contemporánea.Siglo XX. Ediciones Mediterráneo. Murcia. 1895, págs. 100 y 110.

7 – FORNER MUÑOZ, S., Industrialización y movimiento obrero. Alicante 1923-1936. Edita Institución Alfonso el Magnánimo, Valencia, 1982, pág. 234