MOR D'IVERNOIS, Enrique
Pego / La Marina Alta

Natural de Alcalà de Xivert (Castelló) y vecino de Pego. Licenciado en Derecho, nacido en 1888. Fue juez y fiscal municipal de Catarroja entre 1918 y 1921; en 1927 opositó en Madrid para el Cuerpo de secretarios de ayuntamientos y diputaciones, y consiguió plaza de primera categoría. Su primer destino fue Castrojeriz (Burgos) en 1928; después ocupó la secretaría de Lucena de Cid (Castelló) a principios de 1930, de donde pasó al Ayuntamiento de Bullas (Murcia) en noviembre de 1931 y, tras una corta estancia en Gandesa (Tarragona) y Almonte (Huelva), llegó a Pego a finales del año 1932. Durante el bienio negro colaboró en el semanario local de la DRA El Eco de la Marina con el pseudónimo de El Duende del Capitolio, atacando y criticando al gobierno local socialista. Iniciada la guerra, Mor d’Ivernois fue designado, en junio de 1938, juez de primera instancia de Alcoi, por lo que abandonó Pego con un año de excedencia. Pocos días después de acabada la guerra, el 16-IV-1939, el jefe local de Falange de Pego ordenó su ingreso en prisión, con incomunicación total, mientras el Ayuntamiento de Pego iniciaba, el 10-VII-1939, su proceso de depuración, para lo que requirió un informe del alcalde de Alcoi. Según este documento, Mor d’Ivernois era un elemento peligroso y de izquierdas, “que desde muchos años pertenecía al Partido Socialista”, que siempre hablaba mal del Ejército Nacional y constantemente demostró gran simpatía por los rojos. Salió de la prisión de Pego el 9-IX-1939, enfermo de gastroenteritis, pero estuvo en prisión preventiva del 6-VII-1940 al 19-IX-1940. Fue sometido a consejo de guerra el 6-VIII-1941, ante el cual la defensa presentó algunos descargos: en primer lugar, aportó el testimonio favorable de Teodoro Llorente, hijo del poeta y fundador de Las Provincias, que afirmaba que Mor d’Ivernois había sido corresponsal de dicho periódico en Pego y que “en repetidas ocasiones censuró la conducta de los socialistas en su gestión municipal, y más de una vez tuvo que ocultar su nombre para evitar represalias”; en segundo lugar, su base ideológica provenía del tradicionalismo y que en 1928 pertenecía a la Unión Patriótica, partido del cual fue presidente en Lucena de Cid, de donde huyó al proclamarse la República; en tercer lugar, afirmó que gracias a él los hermanos Fernando y Alfredo Ortolá Alcina pudieron pasar a Orán y salvarse así de una muerte segura a manos de los milicianos que los buscaban; y finalmente, defendió que fue él quien salvó de la destrucción el armonio que las monjas tenían en el Asilo-Hospital. Fue condenado a tres años de prisión menor por auxilio a la rebelión. El 1-V-1942 socilitó la reapertura y revisión de su expediente de depuración. Vivía entonces en València y tenía 53 años de edad. Aportó nuevos testigos pero no pudo evitar su destitución definitiva como secretario municipal del Ayuntamiento de Pego. En los últimos años de su vida tuvo que ganarse la vida vendiendo libros y enciclopedias a domicilio. Según el informe del Ayuntamiento de Alcoi, era militante del PSOE y fue juez de primera instancia de Alcoi por mediación del diputado Salvador García Muñoz. En alguna documentación aparece como vecino de Alcoi  (Fuente: AMA, informe sociopolítico n.º 808 - Joan Miquel Almela Cots, “Enrique Mor d'Ivernois. Secretari de l'Ajuntament de Pego a la Segona República”, en Llibre de Festes de Pego, 2015 - AGHD. Sumario 6877. Caja 16257/10).