Francisco Moreno Sáez
Localidad perteneciente a la comarca de La Marina Alta, que tenía 2.913 habitantes en 1930 y 3.194 en 1940. Aunque desde 1930 existía un Círculo Republicano, los monárquicos ganaron las elecciones de abril de 1931 por el artículo 29 de la Ley Electoral, al presentarse como única lista, por lo que fueron anuladas esas elecciones y se repitieron en mayo. La UGT --en especial, su Federación de Trabajadores de la Tierra-era el sindicato mayoritario en la República hasta que, durante la guerra, se creó la CNT: ambas sindicales organizaron Cooperativas Agrícolas, cosa que también hizo la Federación Provincial Campesina, impulsada desde el PCE. La Agrupación Socialista contaba con 32 militantes en 1936 y 1937, aunque debía de tener problemas porque en 1938 no estaba dada de alta en el PSOE. El radio del PCE dependía de la comarcal de Pedreguer -luego, de Dénia- y según sus propios militantes, tenía escasa actividad, porque de los 25 afiliados, 6 estaban en el frente; pese a ello habían extendido la organización a Moraira y querían crear una escuela “para formar a la vez comunistas y personas cultas”, pues la mayoría no sabía leer ni escribir. También había en la localidad afiliados a UR e IR, así como al SRI.
Según la Causa General, una maestra y un ingeniero naval, vecinos de la localidad, fueron victimas de la violencia republicana, aunque parece que en la segunda muerte no estuvieron implicados vecinos de Teulada. En julio de 1936 fueron quemadas las imágenes, ornamentos y objetos de culto de la Iglesia Parroquial -que fue convertida en depósito de fertilizantes-, las ermitas de San Vicente, Divina Pastora, Moraira, el Portet y Fuente Santa, y posteriormente fueron derribados y convertidos en astillas, que vendieron en pública subasta, los altares. De estos hechos fueron acusados más de treinta vecinos. En noviembre de 1936 fue incendiado el Archivo Municipal, por algunos forasteros -según la Causa General-, aunque un vecino de la localidad fue acusado por ello. Nadie fue declarado "faccioso".
Los represaliados por el franquismo fueron casi todos trabajadores agrícolas, aunque encontramos también a algunos carniceros, marineros, maestros, albañiles y chóferes. Fueron acusados, casi todos, de haber tomado parte en el saqueo e incendio de las imágenes religiosas que citaba la Causa General, en diversa medida -haber participado en el incendio propiamente dicho, haber transportado las imágenes, haber estado presentes en esos hechos, etc-. Además, se les condenó por haber sido milicianos y haber marchado voluntariamente al frente, haber desempeñado cargos en el Comité Revolucionario, en el Consejo Municipal y en el Comité que administraba las fincas incautadas; haber intervenido en denuncias, detenciones -sobre todo, de personas que trataban de rehuir su incorporación a filas-, traslado de presos y exigencia de sumas de dinero a personas "de orden".
Un vecino -el acusado de la muerte de la maestra citada en la Causa General- fue condenado a la pena de muerte, que se le conmutó por la de 30 años de reclusión mayor, pena que se aplicó también a otras dos personas. La mayoría fueron condenados por auxilio a la rebelión, a penas muy diversas: no conocemos las sentencias de cerca de veinte vecinos que fueron procesados por la Autoridad Militar. La mayoría estuvieron presos -como era lo habitual en la comarca- en las cárceles de Dénia, Portaceli, Gandía y Alcira, en Valencia, de donde pasaron a las prisiones de Alcoi, Elche, Orihuela, Monóvar y el Reformatorio de Alicante. Otros estuvieron presos antes o después de ser juzgados en Talavera, Figueres, Miranda de Ebro, San Juan de Mozarrifar, Madrid (Yeserías) y Bilbao.
La Ley de Responsabilidades Políticas se aplicó a nueve vecinos. Tres mujeres fueron represaliadas y dos de ellas condenadas a 12 años y 1 día de reclusión menor por auxilio a la rebelión. Algunos exiliados regresaron temporalmente a partir de 1960.