Francisco Moreno Sáez
Localidad perteneciente a la comarca de La Marina Alta, que tenía 551 habitantes en 1930 y 516 en 1940. En abril de 1932 no se celebraron elecciones, pues los candidatos monárquicos fueron proclamados sin oposición, por el artículo 29 de la Ley Electoral. Por lo tanto, se anularon esas elecciones: predominaban entonces el Partido Radical, la Derecha Regional Agraria y el PSOE, que en 1933 consiguió tres concejales. La Agrupación Socialista Agraria de Alcalá de la Jovada tenía 14 militantes en 1936, aunque durante la guerra vio disminuir ese número hasta los 9 o 10 y tuvo que ser reorganizada en alguna ocasión. El sindicato predominante era la UGT -no tenemos noticia de la existencia de la CNT-, había algunos afiliados a IR y el radio del PCE dependía de la comarcal de Pego y también contaba con pocos afiliados -unos 9- y problemas de funcionamiento: según un informe interno, ese radio había sido “constituido por los socialistas, por temor a que lo organizaran los de Izquierda Republicana, que es donde se amparan los fascistas del Pueblo”; de ahí que ni cotizasen los afiliados ni se reunieran.
Según la Causa General, en agosto de 1936 fueron destrozadas la ermita de la Purísima Concepción de Alcalá de la Jovada y la del poblado anexo de Beniaia, cuyas imágenes fueron profanadas. Además, varios vecinos vieron incautadas sus cosechas y tierras, y fueron obligados a pagar algunas sumas de dinero. En el informe elevado por alcaldía al fiscal de la Causa General en noviembre de 1940 aparecían como sospechosos de haber cometido esos delitos varios vecinos, de tres de los cuales se reconoció, en un informe posterior, de enero de 1942, que habían sido incluidos en esa relación "equivocadamente"", lo que no impidió que uno de ellos fuese condenado en Consejo de guerra. Tres vecinos fueron considerados desafectos a la República.
El oficio mayoritario entre los represaliados por el franquismo era, lógicamente, el de labrador, aunque encontramos también a tres electricistas y un secretario del Ayuntamiento. Además de lo citado en la Causa General, la acusación que provocó elevadas condenas de cárcel fue la de haber tomado parte en una batida por los montes de la Vall de Gallinera, en la que fueron capturados algunos vecinos de Oliva allí escondidos y que posteriormente fueron asesinados, sin participación de los vecinos de la Vall d'Alcalá. Por ello, y por lo citado en la Causa General, fueron condenados a 30 años de reclusión mayor por adhesión a la rebelión y a 20 de reclusión menor por auxilio a la rebelión al menos quince vecinos de la localidad. Llama la atención asimismo la condena a 12 años y 1 día de reclusión menor a personas de las que se reconoce en la sentencia que favorecieron a vecinos de derechas y evitaron ""desmanes"". Se les castigó, asimismo, por ser miembros del Comité Revolucionario y del Consejo Municipal, haber actuado como milicianos o haber marchado voluntariamente al frente.
En la mayoría de los casos, estuvieron presos en Pego y Dénia, pasando pronto al campo de concentración de Oliver de Alcoi y a las cárceles de la misma localidad, Portaceli, Gandía, Elche y Alicante. Algunos habían estado presos en Avilés, Astorga y Valdenoceda. Y otros cumplieron condena en el Penal de El Dueso y, varios, en la cárcel de Lleida. Finalmente, fueron enviados varios a Batallones de Soldados Trabajadores en Cartagena o Talavera. La Ley de Responsabilidades Políticas se aplicó a cinco vecinos, no hubo ninguna mujer represaliada y solo tenemos noticia de un vecino que marchó al exilio.
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