Francisco Moreno Sáez

Localidad agrícola perteneciente a la comarca de La Marina Baixa, que tenía 2.285 habitantes en 1930 y 1.708 en 1940. En el panorama político de La Nucía¹ la CNT tenía un predominio absoluto en la clase obrera desde 1919, fecha en que se creó la Sociedad de Oficios Varios El Progreso, que estuvo representada con 395 afiliados en el Congreso de la CNT. Durante la guerra civil, La Nucía fue un modelo de la manera de llevar a la práctica las ideas libertarias, según la prensa confederal. En 1937 decidieron constituir una Colectividad Confederal de Campesinos, adscrita a la Federación Regional de Campesinos de Levante (CNT), que se incautó de 152 fincas agrícolas; también organizó una sección del SIA (Solidaridad Internacional Antifascista). Su influencia trató en vano de contrarrestarla el PCE, que había creado una sección de la Federación Provincial Campesina. El Radio del PCE, que pertenecía a la comarcal de Callosa d’En Sarrià, apenas tenía 15 militantes a primeros de 1938 y funcionaba muy deficientemente, pues en informes internos, se confesaba que algunos campesinos se habían afiliado al PCE “para tener una organización que les amparase y defendiese de las injusticias de que están siendo objeto” y por lo tanto “no tienen una convicción de lo que es nuestro partido”, de manera que, cuando IR abrió una Cooperativa a la que sólo podían pertenecer sus afiliados, muchos afiliados comunistas se marcharon a ella y dejaron el partido. La Agrupación Socialista se constituyó en marzo de 1936 y tenía 15 militantes a finales de 1937, mientras que la UGT apenas tenía afiliados en relación con la CNT y solo se introdujo en la localidad en 1937. Las organizaciones republicanas predominantes eran UR e IR. Las tierras y las canteras fueron socializadas.

Ningún vecino fue considerado faccioso ni hubo víctimas mortales durante la guerra, aunque un vecino que se encontraba exiliado en Francia, fue acusado de haber participado en el asesinato del marqués de Campo Fértil, cuyo cadáver apareció en una partida de La Nucía. Según la Causa General, ya en febrero de 1936, tras las elecciones, fueron asaltadas la Iglesia y las ermitas de San Rafael y San Vicente y destruidas sus imágenes y objetos de culto.

No hubo ningún ejecutado después de la guerra, pues a tres vecinos que fueron condenados a muerte se les conmutó esa pena por la de 30 años de reclusión mayor. El resto de condenados en Consejo de guerra tuvo penas muy variadas, predominando las condenas a 12 años y 1 día de reclusión menor y a 6 años y 1 de prisión por auxilio a la rebelión: en el celebrado el 30-XII-1941 fueron juzgados conjuntamente diecinueve vecinos y vecinas de la localidad. Fueron acusados de haber participado en el incendio de imágenes sagradas, haber desempeñado cargos dirigentes en el Ayuntamiento y las distintas organizaciones sindicales y políticas del Frente Popular, haber sido milicianos y voluntarios en el ejército republicano y haber participado en requisas, incautaciones y exigencias de dinero a personas de derechas.

Casi todos los represaliados, en su mayoría jornaleros del campo y canteros, sufrieron prisión en Callosa d’En Sarriá, Dénia, Orihuela, Elche, Monóvar, Alcoi y el Reformatorio de Alicante, aunque los condenado a penas mayores fueron enviados, como era habitual en esos años, al penal de El Dueso, en Santoña. Algunos estuvieron en los Batallones de Soldados Trabajadores de Ceuta y Belchite.

Se aplicó la Ley de Responsabilidades Políticas a diecisiete vecinos. Fueron muchos los que marcharon al exilio -varios en el “Stanbrook”- y algún vecino trató hasta en dos ocasiones de pasar clandestinamente la frontera con Francia. Dos vecinos de La Nucía -uno de los cuales sobrevivió- fueron internados en los campos de concentración nazis. Cuatro mujeres fueron represaliadas, tres de ellas condenadas por auxilio a la rebelión, por haber pertenecido a un sindicato y haber tomado parte en la destrucción de imágenes, y otra por excitación a la rebelión, acusada de insultos y amenazas a personas de derechas.

Por hechos posteriores al 1 de abril de 1939 fue procesado un vecino, en 1947, acusado de haber tratado de reorganizar, con toros, la CNT-FAI en la provincia, y varios tuvieron, ya en los años sesenta, que declarar ante el tristemente célebre coronel Eymar, Juez Especial de Actividades Extremistas, por haber tratado de organizar un grupo del PCE. En realidad, se trataba de un grupo que enviaba noticias a Radio España Independiente, “La Pirenaica”, sin contacto con ninguna fuerza política: fueron detenidos, maltratados en el cuartelillo de la guardia civil de Callosa d'en Sarrià y procesados.

De acuerdo con las fuentes orales consultadas por Miguel Guardiola, los vencidos fueron objeto de abierta discriminación durante muchos años. Las siguientes personas fueron sometidas a maltrato físico, encarceladas –cuando Franco o su mujer visitaban Alicante eran llevados al cuartel de la Guardia civil de Callosa-, discriminadas, condenadas al silencio, a la asistencia obligatoria a oficios religiosos y a guardar la compostura al paso de procesiones, al margen de sus creencias:

Armengol Santamaría, Miguel, (a) Callando; Berenguer Devesa, Joan, (a) Perpissal; Berenguer Llorens, Tomás, (a) Malda; Berenguer Pérez, Jacinto, (a) Polónia; Cano Cano, Antonio, (a) Cansalá; Cano Cano, María, (a) Ganxo; Cano Lledó, Miguel, (a) Cabut; Cano Llorens, Gabriel, (a) Capeta; Cano Llorens, Juan, (a) Capeta; Cano Lloret, Andrés,  (a) Sedasser; Cano Lloret, Antonio, (a) Garrofa; Cano Lloret, Roque, (a) Garrofa; Cano Lloret, Vicenta, (a) Garrofa; Cano Santamaría, Francisca, (a) Panxut; Cano Solbes, Francisca, (a) Xapa; Cano Timoner, Isidoro, (a) Tomaquero; Company García, Bautista, (a) Gata; Company García, Josefa, (a) Gata; Company Garcia, Ramón, (a) Gata; Congost Lledó, Ángela, (a) Cup; Devesa Devesa, Francisca, (a) Malena; Devesa García, José, (a) El Blanc; Devesa Ivorra, Antonio, (a) Fusteret; Devesa Ivorra, Juan, (a) Rapel; Devesa Llinares, Miguel, (a) Nela; Devesa Pérez, Josefa, (a) Creuera; Fernández Pérez, Antonio, (a) Xufero/Sabater; Ferrando Pérez, Joaquina, (a) Queleti; Flores Cano, Martín, (a) Martí el sabater; Flores Cano, Vicente, (a) Masseguera; Flores Grau, José, (a) Campana; Fuster Boronat, Domingo, (a) Xirlero; García Cano, Joaquín, (a) el Gallo/Ximo Barbeta; García Llorens, Jaime, (a) de Jovita/Caldera; Gimeno Llorens, José, (a) Pep de Gimeno; Grau Congost, Joaquín, (a) de Colassa; Ivorra Devesa, José, (a) Poma; Ivorra Devesa, Miguel, (a) Pintat; Ivorra Llorens, Bernabé, (a) Ratat; Lledó Llorens, Bautista, (a) Caldera; Llorens Lloret, Vicente, (a) de Bárbara; Llorens Such, Esperanza, (a) Queleti; Llorens Such, Joaquín, (a) Queleti; Lloret Cano, Isidoro, (a) Colaora; Lloret Cano, José (a) Ganxo; Lloret Lloret,  Francisca, (a) Mahoma; Lloret, María, (a) Punxetes; Ortuño Berenguer, Francisca, (a) La Morena; Ortuño García, María, (a) Penya; Ortuño Solbes, Ángela, (a) Palafox, Pérez Calvo, Emilio (a) L´agüelica; Pérez Congost, Vicente, (a) Cavallera; Pérez Ivorra, Joaquín, (a) Ximo Rafaela; Pérez Ivorra, José, (a) Sentano; Pérez Ivorra, Juan, (a) de Gustí el negre; Pérez Lloret, Joaquina, (a) Polopí; Vicenta Perica; Quica Basilia; Saiz Cano, Fernando, (a) Batà; Santamaría Devesa, José, (a) Català; Santamaria Lloret, Jaime, (a) Panxut; Santamaría Ortuño, Francisca, (a) Serena; Santamaría Ortuño, Vicente, (a) Panxut; Timoner Ferrer, Bautista, (a) Baptiste Polinari.

¹ Para conocer la evolución de La Nucía en estos años resulta fundamental el libro de Miguel Guardiola Fuster, La Nucía (1918-1939). Crónica social y política, publicado en el año 2000.